Click acá para ir directamente al contenido

Accidente cerebrovascular (ACV): 5 factores de riesgo clave que puedes cambiar

Quienes sufren un accidente cerebrovascular podría resultar con daño permanente. Te contamos cuáles son los factores de riesgo a los que prestar atención.

24horas.cl

Representación de hombre sufriendo un ACV

Lunes 8 de septiembre de 2025

Los accidentes cerebrovasculares, también conocidos como ACV, ocurren cuando el flujo de sangre hacia una parte del cerebro se detiene.

Así lo explica MedlinePlus, portal del Gobierno de Estados Unidos que añade que, cuando este flujo se detiene y el cerebro no recibe nutrientes y oxígeno, puede causar la muerte de células cerebrales y generar daño permanente

A continuación te contamos algunos factores de riesgo que aumentan la posibilidad de que una persona pueda sufrir un ACV. Algunos de ellos, son modificables. Revisa el detalle:

Tipos de ACV y síntomas

Cabe mencionar que existen dos tipos de ACV. Por un lado, el accidente cerebrovascular isquémico, que ocurre cuando un vaso sanguíneo que irriga sangre al cerebro se bloquea por un coágulo de sangre; y el accidente cerebrovascular hemorrágico, que sucede cuando un vaso sanguíneo de una parte del cerebro se debilita y se rompe.

Desde Mayo Clinic precisa que, entre los síntomas, se encuentran:

  • Dificultad para hablar y entender lo que otros están diciendo.
  • Entumecimiento, debilidad o parálisis de la cara, del brazo o de la pierna.
  • Problemas para ver en uno o ambos ojos. 
  • Dolor de cabeza.
  • Problemas para caminar.

Representación de hombre sufriendo ACV

Los 5 principales factores de riesgo

De acuerdo con el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre (NHLBI) de Estados Unidos, muchos factores de riesgo se puede controlar. Estos factores son responsables de entre el 82% y el 90% de todos los ACV:

  • Presión arterial alta
  • Obesidad
  • Inactividad física
  • Dieta pobre
  • Tabaquismo

Otros factores importantes

Otros factores de riesgo se basan en el estilo de vida, la genética  y el medio ambiente.

  • Edad: si bien un ACV puede ocurrir a cualquier edad, el riesgo es mayor en bebés de menos de 1 año y en adultos a medida que envejecen.
  • La ansiedad, la depresión y los niveles elevados de estrés, así como trabajar muchas horas y no tener mucho contacto con familiares, amigos u otras personas fuera del hogar, puede aumentar el riesgo de sufrir un ACV.
  • Antecedentes familiares y la genética: el riesgo de tener un ACV es mayor si uno de los padres u otro familiar ha tenido un ACV, en particular si esto ocurrió a edad temprana. Algunos genes afectan al riesgo de sufrir un ACV, como los que determinan el grupo sanguíneo. Las personas con sangre del tipo AB (que no es común) tienen un riesgo mayor.
  • Vivir o trabajar en zonas con contaminación.
  • Otras afecciones médicas, como la apnea del sueño, las nefropatías y las migrañas.
  • Otros hábitos poco saludables en el estilo de vida, como beber demasiado alcohol, dormir demasiado (más de 9 horas) y consumir drogas ilegales como la cocaína.
  • El origen étnico: en EE. UU., los ACV son más comunes en adultos negros, nativos de Alaska, indios originarios de EE. UU. e hispanos que en adultos blancos.
  • Sexo: a edad más joven, los hombres son más proclives que las mujeres a tener un ACV. Pero las mujeres tienden a vivir más tiempo, por lo que su riesgo durante toda la vida de tener un ACV es mayor. Las mujeres que toman píldoras anticonceptivas o usan terapia de reemplazo hormonal tienen riesgo mayor; al igual que durante el embarazo y en las semanas posteriores al parto. La presión arterial alta durante el embarazo, como en la preeclampsia, aumenta el riesgo de sufrir un ACV más adelante en la vida.
  • Las infecciones o afecciones virales, como el lupus o la artritis reumatoide, pueden causar inflamación.

24 PLAY