El café es una de las bebidas más consumidas del mundo, no sólo por su sabor y aroma, sino también por sus efectos estimulantes y potenciales beneficios para la salud cerebral. Sin embargo, un estudio reciente publicado en Practical Neurology planteó una pregunta clave: ¿A qué hora del día conviene más tomar café para aprovechar al máximo sus efectos positivos?
Según la investigación, el momento óptimo para consumir cafeína está estrechamente relacionado con los ritmos circadianos del cuerpo, particularmente con los niveles de cortisol, una hormona que regula la alerta y el estrés: por la mañana —especialmente entre las 6:00 y 9:00— el cuerpo produce naturalmente una alta cantidad de cortisol, por lo que tomar café en esas horas puede ser menos efectivo e incluso contraproducente, ya que podría generar mayor tolerancia a la cafeína con el tiempo.
ENTONCES, ¿CUÁNDO TOMARLO?
Los autores del estudio sugieren que el mejor momento para consumir café es entre las 9:30 y las 11:30 de la mañana, cuando los niveles de cortisol comienzan a disminuir.
Beber café en ese intervalo permite que la cafeína actúe de forma más eficaz sobre el sistema nervioso central, mejorando la atención, el estado de alerta y el rendimiento cognitivo.
Además del horario, el estudio destaca varios beneficios del consumo moderado y regular de café: puede tener efectos neuroprotectores, con asociaciones observadas entre la ingesta de cafeína y un menor riesgo de enfermedades como el Parkinson y el Alzheimer. También se ha vinculado con mejoras en la función ejecutiva y la memoria a corto plazo.
CUIDADO CON EL EXCESO Y LA NOCHE
Aunque el café tiene múltiples ventajas, el estudio también advierte sobre los riesgos de su consumo en horarios inapropiados:
Ingerir cafeína después de las 14:00 puede interferir con el sueño y afectar negativamente los ritmos circadianos. Además, el consumo excesivo (más de 400 mg diarios en adultos sanos) puede provocar ansiedad, insomnio y otros efectos secundarios no deseados.