Durante las últimas horas el número de víctimas fatales producto de las inundaciones que afectan a la localidad de Kerrville en Texas, ha aumentado a 70, cifra a la que se suman otras 37 personas desaparecidas, cuya gran mayoría son menores de edad que participaban de un campamento de verano a las orillas del Río Guadalupe.
Dentro de las personas fallecidas se encuentra Julian Ryan, un joven padre de 27 años que murió intentando salvar a su familia después de que su casa se inundara. La información fue dada a conocer por su prometida, Christinia Wilson, quien relató tras el inicio de las lluvias, su hogar comenzó a inundarse rápidamente, situación que no pudieron enfrentar.
"Empezó a llover, y tuvimos que luchar para cerrar la puerta para asegurarnos de que no entrara mucha agua. Nos refugiamos en una habitación y comenzamos a llamar al 911", dijo. Fue en medio de esto que Ryan usó su brazo para romper una ventana y que su familia pudiera escapar de la casa que comenzaba rápidamente a inundarse. "Se cortó casi por completo la arteria del brazo", consignó revista People.
A pesar de los reiterados llamados al servicio de emergencias 911, la policía no pudo llegar hasta su casa, por lo que Julian Ryan se despidió de su familia, falleciendo frente a ellos hasta que su cuerpo logró ser recuperado horas después por los diferentes equipos. "Lo siento, no voy a lograrlo, los amo a todos", expresó el joven padre antes de morir.
"Era un buen hombre. Era fuerte y amoroso, siempre feliz. Trató de salvarnos a todos y estaremos por siempre agradecidos", culminó su prometida.
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