El "infierno" tiene túneles, y son sorprendentemente enormes. Venus suele presentarse como el gemelo de la Tierra por su tamaño casi idéntico y su origen común en el sistema solar. Pero mientras aquí prospera la vida, allí la superficie alcanza más de 480 °C, queda atrapada bajo una atmósfera sofocante con nubes de ácido sulfúrico de unos 20 kilómetros de grosor. En ese escenario hostil acaba de revelarse un secreto fascinante: túneles de lava de proporciones gigantescas que resultan difíciles de explicar dadas sus condiciones extremas.
Los tubos de lava son estructuras conocidas en el sistema solar. Surgen cuando un río de lava se enfría en la parte superior y se endurece, mientras la roca líquida sigue avanzando por dentro y acaba dejando un pasadizo vacío.
Y hasta ahora parecía cumplirse una regla sencilla: cuanto menor la gravedad, más espacio podían ganar estos túneles. En la Tierra se conocen ejemplos discretos, en Marte se expanden algo más y en la Luna alcanzan dimensiones colosales.
Sin embargo, nuestro vecino rompe esta regla. "Venus presenta tubos de volúmenes extraordinariamente masivos", explicó Barbara De Toffoli, de la Universidad de Padua, durante el Congreso Científico Europlanet en Helsinki, según cita New Scientist.
El hallazgo del nuevo estudio es desconcertante porque Venus tiene casi la misma gravedad que la Tierra. Sus tubos deberían ser comparativamente pequeños, no rivalizar con los gigantescos túneles lunares que algunos científicos han propuesto como futuros refugios para astronautas.
Para llegar a esta conclusión, los investigadores combinaron imágenes de radar y datos cartográficos de misiones anteriores, identificando cuatro cadenas de fosas sinuosas cerca de volcanes escudo gigantes.
Según explican, estas fosas seguían la pendiente de grandes volcanes, justo en la dirección en que se habría desplazado la lava, y sus proporciones encajan mejor con la huella de antiguos túneles colapsados que con fracturas producidas por la tectónica.
De acuerdo con el estudio, Venus podría albergar "algunas de las cavidades subterráneas más extensas del sistema solar".
¿Qué podría explicar este fenómeno?
Una posible respuesta reside en el entorno extremo del planeta. De Toffoli sugiere que "debido a la altísima presión, se produce un aplanamiento general de los tubos, en lugar de la erosión muy intensa en el suelo que suele ocurrir en otros planetas".
Esta peculiaridad del ambiente venusiano podría permitir que estos túneles alcancen dimensiones extraordinarias, a pesar de estar sometidos a una fuerza gravitatoria similar a la terrestre.
El descubrimiento no solo es fascinante por sí mismo, sino que podría ayudarnos a entender mejor la "evolución térmica y tectónica de Venus, y ofrecer interesantes posibilidades para comprender las condiciones pasadas y presentes del planeta", según concluye el equipo de investigación.