El gobierno talibán de Afganistán informó el sábado el fracaso de la última ronda de negociaciones iniciadas con Pakistán en Turquía para lograr un alto el fuego permanente, atribuyéndole la responsabilidad.
Ambos países se reunían desde el jueves en Estambul para intentar afianzar la paz entre los dos vecinos del sur de Asia que han tenido enfrentamientos fronterizos mortales, luego de explosiones registradas el 9 de octubre en Kabul, que las autoridades talibanas atribuyeron a Pakistán.
Las relaciones se deterioraron en los últimos años por acusaciones de Islamabad de que Afganistán da guarida a grupos militantes pakistaníes.
Acusaciones mutuas
"Durante las conversaciones (en Turquía), la parte pakistaní intentó rechazar toda responsabilidad en materia de seguridad al gobierno afgano, sin mostrar ninguna voluntad de asumir la más mínima responsabilidad ni por la seguridad de Afganistán ni por la suya propia", aseguró el portavoz de Kabul, Zabihullah Mujahid.
"La actitud irresponsable y poco cooperativa de la delegación pakistaní no ha dado ningún resultado, a pesar de las buenas intenciones del Emirato Islámico y los esfuerzos de los mediadores", prosiguió.
Pakistán no ha hecho comentarios por el momento.
El viernes por la noche, su ministro de Información, Ataulah Tarar, sugirió un fracaso sin pronunciar la palabra, agradeciendo en un mensaje a los mediadores y afirmando que correspondía a "Afganistán respetar sus compromisos internacionales, regionales y bilaterales de larga data en materia de control del terrorismo".
"Pakistán seguirá ejerciendo todas las opciones necesarias para preservar la seguridad de su pueblo y su soberanía", escribió.