Alarma ha generado la denuncia de la agrupación Pescadores Industriales del Biobío, que indica que cuatro marcas de jurel comercializan productos que corresponden a otras especies. Son 30 millones de conservas que están la mira, en particular de las marcas Coliseo, Barquito, Novamar y Acuenta, importadas desde China.
La situación ha generado dudas con respecto a cuáles son las verdaderas especies que se están vendiendo, considerando que, según análisis científicos, no corresponden a jurel.
Bajo este contexto, expertos han advertido diferencias nutricionales clave entre el jurel y los productos con los que se está sustituyendo.
Si no es jurel, ¿qué es?: experta advierte diferencias nutricionales
Según un estudio encargado por la mencionada agrupación, muchos de estos productos no contienen jurel chileno (Trachurus murphyi), sino que otras especies, como caballa, sardina española o pescados aún no identificados.
La nutricionista y docente de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad de O’Higgins (UOH), Valeria Urtubia explicó que, si bien todas pertenecen al grupo de los llamados "pescados azules" —con alto contenido de grasas saludables—, sus aportes nutricionales no son equivalentes.
"Una de las principales características del jurel chileno es su contenido de ácidos grasos omega-3, en especial EPA y DHA, que favorecen la salud cardiovascular, el desarrollo neurológico y la función inmunológica", explicó Urtubia. Sin embargo, advirtió que, si bien especies como la caballa o la sardina también son ricas en omega-3, presentan una mayor concentración de lípidos totales y no necesariamente entregan los mismos beneficios en las mismas proporciones.
Precisó que "en promedio, el jurel contiene menos grasa total, pero sigue siendo una excelente fuente de omega-3 de calidad. Cuando se sustituye por otro pescado no declarado, se pierde certeza sobre el tipo y la cantidad real de estos nutrientes esenciales".
Jurel verdadero vs. falso: diferencias en proteínas y micronutrientes
Respecto al contenido proteico, las tres especies –jurel, caballa y sardina española–aportan cerca de 20 gramos de proteínas por cada 100 gramos de alimento. No obstante, las diferencias aparecen con mayor claridad al observar los micronutrientes.
"El jurel chileno destaca por su aporte de fósforo, zinc, selenio, magnesio, calcio, vitamina D y B12, fundamentales para la salud ósea, el desarrollo infantil, la función neurológica y la inmunidad. La presencia y cantidad de estos nutrientes puede variar considerablemente en otras especies", señaló la docente.
Perjuicios para la salud del jurel "falso"
Para Urtubia, el consumo prolongado de pescados mal etiquetados podría tener efectos perjudiciales en la salud pública, especialmente si estos productos son parte habitual de la alimentación de familias o se distribuyen a gran escala, como en programas de alimentación escolar.
"Un etiquetado incorrecto no solo entrega información engañosa, sino que puede contribuir a deficiencias nutricionales en poblaciones vulnerables, como niños, adultos mayores o personas con enfermedades crónicas. Se puede generar un déficit de proteínas, vitaminas y minerales esenciales, afectando desde el desarrollo cognitivo hasta la recuperación de tejidos y la salud ósea", advirtió.
También alertó la posible presencia de aditivos o conservantes no declarados que podrían disminuir la calidad del producto o incluso generar efectos adversos si no son controlados adecuadamente.
Agregó que estas prácticas afectan la confianza de las personas en el sistema alimentario: "Cuando se pierde la certeza sobre lo que se está consumiendo, se debilita la credibilidad tanto de la industria como de la información nutricional declarada".