A casi seis meses de sorprender al mundo del rock internacional anunciado su salida de la banda Molotov, el guitarrista Tito Fuentes dio una entrevista donde dejó en evidencia el complejo momento de salud que vive en su camino a la rehabilitación.
Fueron 11 cirugías a las que tuvo que someterse por las consecuencias físicas que le dejaron sus distintas adicciones.
“En la última intervención algo me salió mal, me dejaron tres días en coma inducido, a dormir, entonces estuve muerto en vida dos días y medio, casi tres, entonces algo cambió en mí”, contó a Playboy México.
En su relato confesó que por 30 años estuvo "haciendo lo que se me da la gana, sin cuidarme física ni mentalmente. Caí en la adicción, alcoholismo, un montón de cosas muy destructivas por no saber hablarlas o tener tiempo de aterrizarlas. Me fui haciendo pedazos”.
Ya con el proceso de rehabilitación iniciado, sostuvo que "pude dejar el alcohol muy fácil, pero algunas sustancias que ni siquiera me gustan, como la cocaína, es un mal viaje. Busqué lastimarme y usar ese mal viaje por no saber decir cosas".
Pese a que lleva tiempo alejado de la banda Molotov, Tito Fuentes sostuvo que en este periodo ha explorado su creatividad en otras facetas, sin que esto implique cerrar la puerta a un regreso a la música.
"Espero que sí (volver a los escenarios). Tengo un colgajo de pierna, entonces decidí que cuando esté listo regreso, no apresurar esto para regresar. Mientras tanto, busco otra extensión de mi expresión emocional en las artes. Por eso lo que hice con Art Bank", contó.
