Iván Arenas, animador y conocido por su personaje del "Profesor Rossa", reflexionó sobre su vida a los 73 años y sus pensamientos sobre la muerte.
Hasta la actualidad, el presentador ha sufrido de cuatro infartos a lo largo de su vida, el primero ocurriendo a sus 31 años y el último en el año 2019. También fue diagnosticado con cáncer de colon en 2020.
"Mi papá murió de un infarto, y joven, con 63... menos mal que yo lo pasé, jaja... Mi hermano tiene tres bypass, yo tengo tres stents (coronarios), tengo un sobrino con trasplante de corazón y mi abuela murió de eso... Yo voy a morir por eso, ya sé que voy a morir de la cuchara" relató en una entrevista con La Cuarta.
Respecto a su muerte, el animador afirmó que preferiría ser cremado y cristalizado: "Hoy día en Estados Unidos están haciendo un experimento y ha dado resultados, que agarran tus cenizas, las llevan a 1.200°C, las cristalizan, y queda un cristal; y te pueden guardar, por ejemplo, en un anillo... Rara la hueá... Sino que me tiren al (lago) Rapel... polvo de mierda".
"No creo en nada después de la muerte. No creo en el alma, en el espíritu, en las penaduras, cementerios ni nada" afirmó.
Cabe recordar que este año, en el mes de febrero, se viralizó la noticia de que el animador había fallecido, información a la que él mismo se refirió en redes sociales.