Carla Ballero sobrevivió a un delicado estado de salud que la mantuvo al borde de la muerte, pero las consecuencias físicas de su enfermedad todavía marcan su día a día.
La comunicadora pasó 60 días internada y tuvo que someterse a dos operaciones que la dejaron con secuelas visibles.
Si bien reconoce que se recuperó casi al 100%, entre los efectos más notorios se encuentra la caída masiva de su cabello, experiencia que la impacto emocionalmente, pero que la llevó a replantearse la importancia de la vanidad.
"Se me cayó como el 70% del pelo a los dos meses del alta. Fue como si me hubiesen hecho quimioterapia, por lo fuerte de los medicamentos", señaló a 24horas.cl, agregando que "me afeité atrás y también gran parte de la cabeza".
Sobre la misma, continuó: "Salirme del foco de la belleza me hizo crecer, valorar lo esencial y conectarme con mi esencia real".
Actualmente, Carla complementa su recuperación con vitaminas y minerales para reforzar su organismo después del intenso tratamiento, lo que a su vez la llevó a una transformación personal:
"Me he querido poco en mi vida y ahora me estoy disfrutando. Siento que estoy en un súper exquisito momento. Disfruto el poder despertarme, disfruto el día a día, y eso no me pasaba antes", cerró.