Después de cinco días de angustia e incertidumbre, la familia de Jaime Acuña finalmente recibió la noticia que tanto esperaba. El joven de 17 años, oriundo de Curacautín, fue encontrado en la ciudad de Vallenar, tras desaparecer el pasado 30 de enero en circunstancias que generaron gran preocupación.
Según el testimonio de su madre en el programa Buenos Días a Todos, Jaime se comunicó con ella antes de partir, dejándole un mensaje inquietante: "Mamá, perdóname, lo siento. Vas a pensar que soy el hijo más malo del mundo, pero voy de viaje. Te quiero mucho, voy a volver, pero voy a volver con platita".
El adolescente habría viajado inicialmente en bus hacia Santiago, con la intención de dirigirse a La Serena y posteriormente a Iquique. Sin embargo, registros de cámaras de seguridad y el testimonio de sus amigos indicaron que se bajó en Vallenar, lo que llevó a las autoridades y familiares a centrar la búsqueda en esa zona.
Este jueves 6 de febrero, finalmente se confirmó su hallazgo en Vallenar, poniendo fin a días de incertidumbre. Aún no se han revelado detalles sobre su estado de salud ni las razones de su viaje, pero su familia se encuentra aliviada por su regreso.
Según se informó, el joven se presentó con su tutor de forma voluntaria en Carabineros, por lo que la Fiscalía de Curacautín instruyó las diligencias para indagar en lo sucedido.
Tras la noticia, su madre, a través de su cuenta de Facebook, publicó: "Agradezco a Dios primeramente por permitir que encontrarán a mi hijo".
"También agradezco a toda la gente de Lonquimay, Curacautín y desde aquí para allá todo el mundo está preocupado por mi hijo. Gracias, muy agradecida de las autoridades, les agradezco su cariño y apoyo, mil gracias. Más feliz que nunca... espero abrazarlo mucho", escribió.