"Solo quise salvarlos para que no sufrieran más", fue parte de los mensajes que recibió el esposo de la mujer que le disparó de muerte a sus dos hijos en Chiguayante, región del Biobío.
La imputada, Marta Franco, quedó en prisión preventiva. Esta semana se realizó la tercera audiencia en contra de la mujer, quien enfrenta cargos por la muerte de sus hijos: Hugo, de 35 años, y Marta Pereira Franco, de 39 años.
Marta Franco, de 64 años, se encuentra sometida a calmantes en el Hospital Penitenciario y fue citada el 5 de noviembre para evaluar si es imputable.
"Perdóname, no quería que tú sufrieras, solo quise salvarlos para que no sufrieran más", fue el mensaje enviado a su esposo tras cometer el crimen. Hasta ahora es la única explicación de lo sucedido a una familia que, según declaró el padre ante la PDI, era normal y hasta podía ser calificada de feliz.
"Mis hijos no tenían grandes problemas. Hugo era un tipo sano, que no iba fiestas ni debía alcohol, tenía un buen pasar, y mi hija Marta, ella tenía una condición de tamaño, estatura baja y sufría de dolores debido a un tratamiento que le hicimos para crecer. No obstante, ella no tenía problema alguno con problema alguno con todo lo sucedido", declaró el padre en la audiencia.
Además, la mujer dejó una libreta con un mensaje a su hermano que decía lo siguiente: "Solo nos adelantamos, nos vamos felices como en el fútbol, nos retiramos en nuestro mejor momento, yo feliz de estar junto a mis dos hijos que amo".
Cabe señalar que, tras el crimen ocurrido el pasado 24 de septiembre, la mujer tomó su perro, al auto de su hijo y viajó a Cabrero y de ahí al área rural de Coihueco. Tras casi 180 kilómetros de recorrido, fue cuando Carabineros la detuvo, portando aún una de las dos armas usadas en los crímenes.