Un inesperado momento se vivió en una iglesia evangélica de Perú cuando, en medio de una transmisión en vivo, la pastora Nélida Rojas interpretó un terremoto como una muestra del poder divino y animó a su congregación a permanecer firmes dentro del recinto y seguir alabando a Dios.
El hecho ocurrió el 15 de junio durante un culto transmitido en directo por la Iglesia “El Gran Yo Soy” en Lima. Mientras se sentían los efectos de un sismo de magnitud 6.1, lejos de detener la ceremonia o evacuar, Rojas exclamó con fervor: “¡Más fuerte! ¡Aleluya, gloria al Señor, gloria a Dios!”. Y añadió: “No se muevan, alaben al ‘Gran Yo Soy’, ¡Aleluya! ¡Gracias! ¡Más fuerte, más fuerte, más fuerte! Eso significa que nuestro padre celestial está aquí”.
Durante su mensaje, la pastora exhortó a los presentes a no temer: “Eso es un terremoto en algún lugar, no tengan miedo. Si están bien con nuestro Señor celestial, deberían disfrutarlo en lugar de asustarse. Digan ‘Gracias, Dios’”.
Reacción y explicación posterior tras palabras de la pastora
La inusual respuesta fue ampliamente compartida en redes sociales, donde generó tanto críticas como muestras de apoyo. Ante la controversia, Rojas difundió un video el 16 de junio explicando su postura y reconociendo el impacto de sus palabras.
“La expresión que usé cuando dije ‘más fuerte’ fue una respuesta inmediata basada en mi convicción y la fe que tengo en Dios. Estas fueron circunstancias inesperadas y no planeadas, y reaccioné instintivamente, ya que mi instinto me llama a confiar en Dios en todo momento”, afirmó.
Asimismo, intentó aclarar que su intención fue evitar el pánico entre los asistentes: “Cuando el terremoto estaba concluyendo, vi señales de alarma entre los hermanos congregados. Traté de mantenerme calmada. Nunca ha habido acceso restringido a la iglesia ni personal impidiendo el paso de nadie. Tal vez no usé las palabras adecuadas, pero el mensaje fue comprensible. Traté de calmar el ambiente para que la gente no se alterara. Pido disculpas a quienes se sintieron ofendidos o afectados por lo sucedido”.
El terremoto de magnitud 6.1 tuvo consecuencias lamentables: según medios locales, se reportó al menos una persona fallecida, varios heridos y daños en infraestructura en diversas zonas del país.