Estaba todo listo para que el Claro Arena se reinaugurara con el partido entre Universidad Católica y Ñublense, válido por la decimonovena fecha del Campeonato Nacional, pero la negativa de la DOM de Las Condes obligó al cuadro estudiantil a buscar un "plan B" para llevar a cabo dicho encuentro.
Sin embargo, el conjunto cruzado recibió otro revés luego que la ANFP decidiera suspender el encuentro hasta nuevo aviso. "La Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) nos informó que el partido entre Universidad Católica y Ñublense de Chillán, programado inicialmente para el domingo 10 de agosto", indicó.
Radio ADN puntualizó que la Delegación Presidencial Metropolitana (DPM) tampoco autorizó el Estadio Santa Laura-Universidad SEK, recinto que venía recibiendo los duelos de la UC.
Así las cosas, el fútbol chileno vivió un nuevo bochorno.