Hace pocos días se cumplió un año desde que Robinho fue encarcelado tras ser sentenciado a nueve años de presidio por una violación grupal en Italia a una ciudadana albanesa en el 2013 al interior de una discoteca.
El exfutbolista que registró pasos por el Santos, Real Madrid, Manchester City o AC Milan, se encuentra internado en la penitenciaría de Tremembé, al interior de São Paulo. Este recinto es conocido por ser la denominada "cárcel de los famosos", donde conviven políticos y celebridades, además de asesinos famosos.
La vida de Robinho en la cárcel
De acuerdo con Marca, el exjugador se ha concentrado en mantener un buen comportamiento que le permita optar a la libertad condicional. Además, resaltan que mantiene una relación "perfecta" con el resto de los reclusos.
También indicaron que "cuando juega al fútbol lo hace con botas prestadas por el resto de reclusos, encantados de verle jugar en el patio". Incluso en su primer partido ya recibió una fuerte patada que lo dejó en el suelo tras realizar una bicicleta. "Ya le han bautizado" gritaron los demás presos.
Además de las actividades deportivas, Robinho también arregla televisores y radios gracias a un curso de electrónica que tomó. Junto con ello, también se inscribió a un club de lectura, y también se dedica a cuidar el huerto del recinto.
Junto con lo anterior, también completó los 10 módulos del Programa de Educación para el Trabajo y la Ciudadanía, en busca de la rebaja de la pena o que pueda cumplir su condena en régimen semiabierto.
Cabe mencionar que por cada 12 horas de trabajo se le rebaja un día su pena de 9 años.