Lorena Soto Lobos, una madre chilena de 43 años, murió de forma inesperada y en extrañas circunstancias dentro de su departamento en Nueva York, Estados Unidos.
La mujer vivía desde hace poco más de un año en el distrito del Bronx junto a su pareja, un ciudadano de origen dominicano, quien la halló sin vida. Hasta el momento, las autoridades de Estados Unidos no han precisado la causa de su fallecimiento.
En conversación con Mega, su familia entregó sus hipótesis respecto a lo que pudo haberle ocurrido, apuntando directamente a que su pareja podría tener más información.
De acuerdo con Pablo Soto, hermano de Lorena, la madre se fue a vivir al país norteamericano en febrero del año pasado. Allá comenzó un tratamiento por un dolor que tenía en su columna, es por esta razón que iba a ser operada por tercera vez el pasado 9 de septiembre.
El día en que murió había ido a hacerse exámenes: "En la tarde habló con mi hija por WhatsApp y Lorena se veía bien, todo normal. Pero de repente dejó de escribirle, pensamos que eran problemas de señal".
Sin embargo, horas después fue encontrada muerta por su pareja. La mujer fue hallada en el suelo y boca abajo.
"Él dice que la puerta de la pieza estaba cerrada y que tuvo que forzarla. Vio a Lorena tendida con una data de muerte de aproximadamente dos horas", señaló.
De acuerdo con su madre, Clotilde Lobos, el fallecimiento de su hija fue completamente inesperado porque "ella estaba bien, sana y contenta".
Pero aclaró que la mujer tenía ganas de volver a Chile porque extrañaba a sus hijos de 16 y 25 años, y además no encontraba trabajo.
"Ella estaba aburrida porque no encontraba trabajo, tenía problemas, porque quería trabajar, pero no tenía los papeles al día, ya que llegó con visa de turista", afirmó.
Por otro lado, apuntó que la pareja estaba teniendo conflictos: "Tenía problemas con su pareja, era muy celoso, ella lo amaba, pero la presionaba mucho a ella. (...). Ella me decía que la relación ya no daba para más, pero no dudo de él, no creo que le haya hecho daño".
Asimismo, agregó que le gustaría que el hombre "fuera sincero conmigo y me dijera qué pasó con mi hija, esa es la angustia, saber qué pasó, porque ella había hablado hace solo un par de horas con mi nieta".