Durante la jornada de este martes, la Corte de Apelaciones de Coyhaique confirmó la libertad condicional de Mauricio Ortega, condenado por la brutal agresión a su expareja, Nabila Rifo.
Según información del Poder Judicial, este martes acogió 24 solicitudes de un total de 35 realizadas por internos de diversos recintos y se resolvió entregar el derecho de libertad condicional a "ocho de Coyhaique, siete de Puerto Aysén, seis del Centro de Educación y Trabajo Valle Verde, dos de Cochrane y uno de Chile Chico".
Entre ellos se encontraba Mauricio Ortega, quien quedó con libertad condicional tras cumplir la mitad de su condena: 8 años en prisión.
Agregaron que, "los requisitos para acceder al cumplimiento de la pena en libertad condicional son: tiempo de pena cumplida (la mitad o dos tercios); haber observado conducta intachable en el establecimiento penal; y contar con un informe de postulación psicosocial elaborado por un equipo profesional del área técnica de Gendarmería, que permita orientar sobre los factores de riesgo de reincidencia del interno o interna".
Cabe señalar que, el ataque se produjo en el año 2016, cuando Nabila se dirigía a la casa de su madre, para escapar de otro episodio de violencia que estaba sufriendo de parte de su conviviente. Ortega la persigue y le pide que se detenga a conversar, pero Nabila le dijo que ya no lo soporta y que no quiere vivir más con él. En un arranque de furia la golpeó con un bloque de cemento en la cabeza y la dejó aturdida en la calle.
Después del brutal golpe, que ya había dejado a Nabila Rifo con riesgo vital, Mauricio Ortega se retiró del lugar para regresar casi inmediatamente con un objeto punzante, con el cual procede a extraerle ambos globos oculares, primero mediante palanca y después desgarrándolos con la mano. La mujer ingresó en estado de coma al hospital.
Además de la amputación de los ojos, Nabila presentaba al menos dos fracturas de cráneo, fracturas en los huesos de la cara, perdida de piezas dentales, lesiones en el pabellón auricular derecho, en la piel y en sus extremidades.
El 11 de julio de 2017, la Corte Suprema acogió el recurso de nulidad de la defensa y rebajó la pena a Mauricio Ortega de un total de 26 a 18 años de cárcel por la brutal agresión. Según el máximo tribunal del país, no se acreditó la intención del acusado de matar a la mujer a la que le sacó los ojos, es decir, descartó el femicidio frustrado.
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