Un nuevo estudio de la Universidad de La Frontera ha puesto en evidencia una alarmante desaceleración en la creación de empleo femenino en Chile. A pesar de que entre marzo y mayo de 2022 y 2023 se generaron cerca de 400 mil nuevos puestos de trabajo para mujeres, la situación dio un giro drástico en los últimos 12 meses, donde apenas se crearon 18 mil empleos femeninos en ese mismo periodo, evidenciando una caída superior al 90%.
Según el estudio, el desempleo femenino ha ido en aumento sostenido. A fines de 2022, había 361 mil mujeres sin trabajo; en 2023, la cifra subió a 387 mil; y hoy se sitúa en torno a las 450 mil.
Uno de los datos más preocupantes es que 128 mil, casi una de cada tres mujeres desempleadas, es la principal proveedora del hogar. Esto implica un impacto directo y severo en los ingresos familiares, especialmente en un país donde un alto porcentaje de los hogares tienen a una mujer como jefa de hogar.
La desocupación femenina ha alcanzado el 10,1%, y en el caso de las mujeres jóvenes, entre 20 y 24 años, el desempleo llega al 24%.
"Estamos hablando mucho más que una simple desaceleración de la creación de empleo. Estamos hablando derechamente de un frenazo en la creación de empleos para mujeres. Y lamentablemente los grupos de mujeres más afectados han sido las mujeres jóvenes, las mujeres de menor escolaridad y también las mujeres que cumplen el rol proveedor económico principal del hogar", explicó Patricio Ramírez, coordinador Observatorio Económico Social de la UFRO.
Esta situación no solo plantea un desafío económico, sino también social, ya que profundiza las brechas de género y limita el desarrollo y autonomía de cientos de miles de mujeres en el país.
Con la entrega del nuevo informe del INE programada para mañana, se espera que se profundice el debate sobre las medidas necesarias para reactivar la generación de empleo femenino y proteger a las mujeres más vulnerables del mercado laboral chileno.