En un contexto en que acceder a una vivienda propia sigue siendo uno de los principales desafíos para miles de familias en el país y en el que el subsidio a la tasa hipotecaria podría acabarse antes de lo programado, considerando que actualmente quedan 17 mil cupos de los 50 mil previstos para 2027, el ordenarse con las finanzas toma una relevancia clave al momento de postular a un crédito hipotecario.
Hoy, los bancos ponen especial atención en la estabilidad financiera y en la capacidad real de pago de las personas, evaluando distintos indicadores antes de aprobar un financiamiento.
Entre los principales factores que inciden en la aprobación de un crédito hipotecario se encuentra el pie disponible, ya que refleja la capacidad de ahorro del solicitante y permite reducir el monto que el banco debe financiar. Contar con un mayor pie no solo disminuye el riesgo para la entidad financiera, sino que también puede traducirse en mejores condiciones de crédito.
Antes de postular a un crédito hipotecario, se recomienda contar con una propiedad definida y asegurarse de disponer del pie necesario para la compra, que generalmente, en el caso de primeras viviendas, oscila entre el 10% y el 20% del valor de la propiedad.
“Ahorrar para el pie no solo acerca a la vivienda propia, sino que también fortalece significativamente la posición del solicitante frente al banco, al disminuir el monto a financiar y mejorar su condición financiera”, explica, Francisco Recabarren, fundador y gerente general de Hogarízate, proptech que permite convertir el arriendo en el pie que se necesita para comprar una vivienda y brinda asesoramiento financiero a sus clientes.
Otro punto relevante es cuidar el comportamiento financiero en los meses previos, manteniendo todas las cuentas al día y evitando solicitar nuevos créditos, lo que aumenta las probabilidades de obtener un resultado positivo. Además, es importante calcular un dividendo que no supere el 30% de los ingresos familiares, para que sea realmente manejable en el tiempo. Tener este monto definido con anticipación ayuda a evitar posibles rechazos en la evaluación de los bancos.
Finalmente, llegar con la documentación ordenada resulta clave para agilizar la postulación. Contar con liquidaciones de sueldo, contrato laboral y antecedentes previsionales actualizados permite evitar retrasos innecesarios y facilita la revisión por parte de las entidades financieras.
“Mientras más predecible y consistente sea el manejo financiero de una persona, mayor es la claridad y confianza con la que el banco puede evaluar y aprobar su solicitud de crédito hipotecario”, finaliza el gerente general de Hogarízate.