Antes de que el reloj marcara las 21:00 horas, Princesa Alba ya había convertido el Estadio Nacional en una pista de baile. Su energía, sus bailes y su carisma dejaron la cancha ardiendo. El público estaba listo.
Las luces se apagaron y, luego de una larga intro, Dua Lipa apareció imponente, entre destellos y envuelta en humo frente a las más de 60 mil personas que la esperaban eufóricas.
La cantante británico-albanesa dejó claro que su regreso a Chile no sería uno más: habló constantemente en español, interactuó con el público y mostró una cercanía genuina que sorprendió incluso a los más escépticos.
Cambios de vestuario
Durante las casi dos horas de espectáculo, Dua cambió de atuendo cinco veces bajo la guía de su estilista Lorenzo Posocco.
Comenzó con un bustier plateado de Jean Paul Gaultier, luego pasó a un sensual enterito de encaje negro diseñado a medida por Alessandro Michele para Valentino; y siguió con un ceñido body o catsuit rojo de Valentino.
Más tarde sorprendió con un vestido negro con flecos de Balenciaga y "coronó" la noche con una bomba dorada con cadenas y strass de Channel.
Créditos: DG Medios y Andie Borie
Histórico tributo
Y entonces sucedió. Luego de explicar el motivo de su elección, "Tu falta de querer" de Mon Laferte comenzó a sonar. El estadio estalló y miles de voces acompañaron cada verso de la desgarradora canción.
Dua Lipa no sólo cantó; sino que rindió homenaje a la chilena con una versión llena de emoción: el guiño perfecto que quedará grabado en la memoria del público.
Cercanía con sus fans
Entre canciones, Dua bajó del escenario, saludó a fans, leyó pancartas, se tomó selfies, felicitó cumpleaños y hasta elogió outfits con gran entusiasmo.
Mientras montaban el set de These Walls, caminaba entre gritos y lágrimas de alegría, regalando uno de los momentos más memorables del show.
Escenario flotante y un cierre de alto impacto
Un segundo escenario central elevado, ubicado justo en medio del secto cancha, fue otro de los puntos altos: allí, la cantante interpretó sus temas más íntimos, rodeada de luces suaves y una atmósfera etérea iluminada por sólo por las linternas de los celulares.
El desenlace fue una ráfaga de hits: New Rules, Dance the Night (Barbie), Don't Start Now y Houdini. Cuatro himnos que encendieron al público hasta el último segundo.
Y para quienes aún no la han visto, todavía quedan tickets disponibles para su segundo show este martes 12 de noviembre en el Estadio Nacional.