Paulo Marín Tapia, de 48 años, casado y padre de tres hijos, es hasta el momento la única víctima fatal del derrumbe al interior de la mina El Teniente de Codelco, en las labores del proyecto Andesita.
Su cuñado, el minero Jaime Cortés, habló en medio del velorio de su familiar, que se realiza en Illapel. "Tenemos una pena muy grande, no se las puedo explicar", declaró a Canal 24 Horas. Según su relato, ambos se criaron juntos y compartían la pasión por el fútbol y los caballos.
"Pablo va a dejar un vacío muy grande, era un excelente minero", agregó. "Perder la vida de Pablo, no tengo palabras para explicarlo. Él siempre fue siempre correcto, era muy derecho".
Sobre la investigación, apuntó a negligencia de la empresa. "Como familia queremos que se aclare, porque hay muchas cosas que se están especulando, pero yo creo que hay fallas que tenemos que ver por qué pasaron. Hay muchas herramientas de la minería, procedimientos, matrices, sistemas que ponen para monitorear la roca. ¿Por qué no pararon, no sacaron a la gente?", reflexionó. "¿Por qué tuvieron que perder una vida?".
"Hay situaciones que no se hicieron correctas. No puede caerse un nivel casi completo. Aquí hay una falla, una falla humana, negligencia, por qué cómo pasó eso", añadió.
Asimismo, hizo un llamado a la celeridad de la investigación. "(A la) autoridad que hagan su trabajo, tienen hartas herramientas, tienen que revisarlas, ver quién falló, no puede venirse abajo una mina, tiene que tener estándares".
Además, aseguró que Codelco no se ha contactado con la familia. "No hemos tenido contacto con la empresa ni de nadie, eso se dará un poco más adelante, por el momento queremos vivir este luto con Paulo, estos días que nos quedan con él".
Respecto a acciones legales, indicó: "No hemos pensando todavía en eso".
